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Han pasado más de tres semanas desde que Rusia invadió Ucrania, y aunque las cosas podrían ser peores, no son geniales. Mientras que el pueblo ucraniano ha luchado, Estados Unidos ha luchado por encontrar una manera de echar una mano sin incitar a la Tercera Guerra Mundial, con poca ayuda del Partido Republicano. SNL trató de encontrar lo divertido en esta trágica situación, con su último episodio que muestra al presidente Joe Biden reuniéndose con un grupo más importante: TikTokers.
James Austin Johnson repitió su aclamada versión del autodenominado «teléfono fijo de los presidentes» cuando la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki (una Kate McKinnon fulminantemente sarcástica), lo presentó a un grupo de personas influyentes en línea. Uno de ellos, interpretado por Chloe Fineman, sugirió poemas como una forma de combatir a las fuerzas rusas, solo para terminar haciendo una variación de la súplica instantáneamente infame de AnnaLynne McCord al presidente Vladimir Putin. Otro, interpretado por Aidy Bryant, soltó teorías de conspiración de extrema derecha. Otro, interpretado por Kenan Thompson, era el tipo equivocado, no un TikToker sino un techador de Pittsburgh.
Eventualmente, el día fue salvado, más o menos, por Bowen Yang, quien apareció sin camisa con un émbolo sobre su pezón izquierdo. “La idea de preguntarle a las estrellas de TikTok cómo luchar contra Rusia puede parecer una broma, pero recuerden, dijeron lo mismo sobre la radio en la Segunda Guerra Mundial”, dijo Yang al grupo. “Nunca subestimes la importancia de la nueva tecnología y cómo llega a los jóvenes de maneras que nunca podrás entender. TikTok no es un truco infantil, tiene más poder y más influencia que las noticias de la noche».
Da la casualidad de que la verdad es tan extraña como la ficción. La Casa Blanca realmente es reunión con TikTokers sobre mensajería, mientras que el Kremlin está haciendo lo mismosolo con desinformación.
Puedes ver el boceto en el video de arriba.
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