nube

Descubre la nube como mecanismo estratégico de innovación para tu empresa

1490

Migrar las arquitecturas a la nube se ha vuelto moneda corriente entre las empresas actuales. A través de diversos proveedores de servicios en la nube, como Preteco, cada vez más negocios se están subiendo al carro del Go To Cloud, debido a su amplio abanico de resultados comprobables y a la rentabilidad a corto y largo plazo que supone. 

¿Qué beneficios trae la nube?

Migrar sus arquitecturas a la nube no solo garantiza los más altos estándares de seguridad para la información de un negocio, sino que también garantiza que tanto la potencia como la capacidad de almacenamiento del sistema estarán siempre a la altura de los flujos y transacciones de datos que deban procesarse. 

Para una empresa que desee posicionarse y actuar de manera competitiva en los mercados actuales, los cuales cambian constantemente y son altamente demandantes, no pueden darse el lujo de que una baja potencia o un almacenamiento mal optimizado les genere pérdidas, tanto en capital como en clientes.

Por eso, contar con una arquitectura en la nube capaz de expandirse de manera sencilla y en pocos instantes para adaptarse a las necesidades del momento supone una ventaja sustancial por sobre la competencia.

Pero quizás el mayor atractivo de contratar a un proveedor de servicios en la nube es la posibilidad de delegar ciertas tareas que al personal de una empresa podían le consumir enormes cantidades de tiempo.

El óptimo mantenimiento de las arquitecturas IT tradicionales, aquellas que se alojaban de manera física en las propias empresas, demandaba no sólo enormes cantidades de tiempo, sino también de dinero. Se las debía alojar en una habitación climatizada y adaptada para mantenerla en cierta temperatura, se debía chequear constantemente que todo funcionara bien, si algo se rompía se debía contratar a un técnico que vaya y lo arregle e invertir en el hardware correspondiente para reemplazar los componentes rotos.

Todo esto ya supone un dineral, y si a ésto le sumamos el desembolso económico que representa mantener las arquitecturas actualizadas, es decir, que sus componentes sean siempre de última generación y que puedan responder correctamente a las demandas, las cifras se disparan.

Con las arquitecturas alojadas en la nube, todas estas preocupaciones son cosa del pasado. Ahora, son los propios proveedores quienes pasan a ocuparse de todo esto, ampliando la capacidad de almacenamiento y la potencia a medida que sea necesario, de forma casi instantánea, así como resolver cualquier falla que pueda ocurrir, dado que son ellos quienes ahora alojan toda la arquitectura. Esto no solo libera a las empresas de enormes cantidades de tiempo que pueden reinvertir en sus propios negocios, sino que les ahorra muchísimo dinero.

¿Cómo se migra hacia la nube?

Si bien migrar a la nube no es un proceso difícil, eso no significa que no requiera de una correcta planificación y de seguir una serie de pasos si se desea lograrlo de manera exitosa.

Antes que nada, hay que dejar una cosa clara: migrar a la nube NO es simplemente tomar la arquitectura que ya se tiene y moverla a un entorno cloud. Hacer eso podría comprometer seriamente tanto la seguridad como el funcionamiento de toda la infraestructura, puesto que los requerimientos para funcionar en la nube son muy diferentes.

Por eso, es fundamental llevar a cabo un proceso de discovery, para listar todos los componentes de los cuales se compone la arquitectura de la empresa y de qué manera se los utiliza. A partir de esto, se tendrá una base sólida sobre la cual diseñar y construir una arquitectura que pueda estar a la altura de todos esos requerimientos, para que así el proceso de adaptación sea lo más veloz y sencillo posible.

Luego llega el momento de evaluar qué método de migración utilizar, en base a la cantidad de información y aplicaciones que deban traspasarse y el nivel de sensibilidad de los mismos, para así garantizar que el proceso se pueda dar de la manera más segura posible.

Ya con la arquitectura construida en base a la información recopilada en el discovery, se puede proceder con la migración. La transición puede ser directa, o contar con una etapa media en la cuál algunas cosas estén alojadas en los data-centers físicos y otras en la nube, lo que se conoce como una arquitectura híbrida, con el objetivo de volver más natural y paulatino el traslado.

Ya habrá quedado claro lo rentable que puede ser migrar a la nube. Si te interesa implementar esta tendencia en tu empresa, podés ponerte en contacto con alguno de los proveedores de servicios en la nube que trabajan en Latinoamérica, como Preteco. Su equipo de profesionales podrá brindarte atención personalizada sobre cómo llevar a cabo un proceso de migración que se adapte a las necesidades y presupuesto de tu negocio.

Si te interesa saber más sobre la migración a la nube, te invitamos a leer: Go To Cloud, una forma de fortalecer la productividad de tu negocio.